domingo, 29 de marzo de 2009

Monólogos de ayer y de hoy: Las películas de miedo

Veías Tiburón y estabas tres meses sin acercarte a la bañera

Todos hemos visto alguna película de terror. No importa cuál sea: Pesadilla en Elm Street, Viernes 13, Drácula, no importa. La cuestión es que esas películas, supuestamente destinadas a darnos miedo, nos acaban dando más gracia que otra cosa. Examinemos la típica escena que encontramos en cualquiera de estas cintas:

Una chica joven -porque siempre es una chica de entre 15 y 25 años. No me preguntes por qué pero es así- se prepara para darse una ducha, llega el asesino y se la carga, normalmente con un cuchillo. La escena, hecha para que nos meemos encima, lo máximo que nos causa es que gritemos “¡No! Todavía no la mates. ¡Que está a punto de quitarse la camiseta!”.

Sin embargo, intentad recordad. Estas películas solían dar miedo. ¿Os acordáis cuando éramos pequeños (hasta más o menos los 13 años) y las veíamos? Puede que os cueste creerlo, ¡pero aterraban de verdad!

Veías Tiburón y estabas tres meses sin acercarte a la bañera. ¡Que me va a salir uno por el desagüe! Y si veías Drácula de Coppola ni te cuento. ¡Años sin fiarte de tu sombra! Literalmente. Cada vez que alguien decía “Yo nunca bebo vino” te tapabas el cuello como un idiota. Te causan traumas que duran años. Yo sigo sin fiarme de los jugadores de hockey, y más si son leñadores en sus ratos libres de esos que cortan con motosierra.

Tal vez una de las razones por las que ya no nos dan miedo es porque nos empeñamos en ridiculizar las distintas escenas. Pongamos de ejemplo la manida situación siguiente:

Una chica -recuerdo: ¡siempre es una chica de entre 15 y 25!- es contratada como canguro por una pareja para cuidar de su único hijo mientras se van al cine o al teatro. Aprovecho para preguntar algo: ¿Cuánto demonios dura la película a la que van los susodichos padres en ese universo paralelo del terror? Porque, si secuestran al niño, a la chica le da tiempo de cruzar de un lado a otro del país a rescatarlo y siempre llega antes que los padres, ondia ya. Como no hayan ido a ver las seis películas de La Guerra de las Galaxias del tirón...

Pues la chica, nada más irse los padres del crío -otro dato; el crío siempre es un niño, nunca una niña. Sólo es niña si es la mala de la peli por alguna extraña razón- le da de comer, lo baña, le pone el pijamita y lo acuesta. Que digo yo, para cobrar 20 dólares la hora no hace mucho. Acto seguido se pone hacer burradas como hacer palomitas, ver la tele o pasarse horas hablando por teléfono o con su novio o con su amiga. Nunca veréis a una canguro lesbiana hablando con su novia o con un amigo (chico). Así de esquemáticas son las pelis de miedito.

A partir de aquí puede pasar dos cosas: 1) Se va la luz y el teléfono, dejando a la chica a medias y cuando vuelve suena el teléfono; o 2) Si no hablaba por teléfono, suena de todas formas. La chica nunca piensa “No es mi casa, así que mejor no lo cojo por si acaso”, pues si se funde el dinero de los anfitriones en comida, tele y teléfono, ¿por qué no coger el teléfono? Y siempre contesta con un “¿Sí?”, jamás con un “Hola, soy Cindy, la niñera. Los Stevenson no están en este momento”.

Ahora viene lo único en lo que suele diferir este tipo de escenas. La voz del que contesta puede ser cualquiera: desde una voz ronca y jadeante hasta la de Kylie Minogue pasando por Mickey Mouse. Pero siempre, SIEMPRE, se sabrá el nombre de la chica y contestará diciendo “Hooola, Ciiindy”. Así, con tres oes y tres ies. Cualquiera de nosotros sentiría en ese momento unas ganas incontenibles de colgar. Pero nooooo, Cindy contesta “¿Quién es?” tan panchamente.

Aquí el misterioso del teléfono dice “¿Qué tal el niño?” y Cindy lo más normal que podría hacer sería ir a ver cómo está el bebé. Pero, una vez más, nooooo, ella vuelve a preguntar que quién es y sólo cuando la persona misteriosa cuelga es cuando va al cuarto del niño -que siempre está en la otra punta de la casa y en el tercer piso- para descubrir que no está.
A partir de aquí las distintas películas difieren totalmente.

Analicemos otra escena tipo. La reunión / fiesta / orgía adolescente en casa de la protagonista. Lo de las barras ha sido para diferenciar entre lo que ellos dicen que es, lo que realmente es y lo que parece tras cuatro cervezas. Aquí siempre mueren todos menos la prota y el asesino suele ser o bien su novio, bien su ex, bien su hermano, bien su padre, la cuestión es que el asesino siempre es un hombre cercano a la prota que, una vez más, nos muestran originalidad al ser la prota una chica rubia que supuestamente tiene 16 años pero que aparenta 34 años, 4 rinoplástias y 6 implantes de silicona.

Los personajes se dividen en: a) La protagonista; b) Sus amigos, que siempre son el novio, la guapa / zorra, la inteligente, el chistoso, el gay y un sexto personaje que siempre es pariente de alguno de los anteriores (primo de la guapa, hermana del novio, el gemelo del gay, etc), y por cierto, todos sabemos que el chistoso siempre será el primero en morir; c) Un montón de personajes secundarios sin nombre ni personalidad que sólo están para que los maten; y algunas tienen a d) El reportero o policía de turno que es el encargado de darle el golpe de gracia al asesino, como por ejemplo con una pistola.

Esto sigue un esquema: el primero en morir es el personaje chistoso, que normalmente se encuentra con el asesino cuando va a buscar cervezas al garaje. Esta escena es patética, pues el tío siempre muere por accidente haciendo honor a su papel de payaso: suele caerse mientras escapa y si no se clava algo que lo atraviesa se da con la cabeza contra algo afilado. Vamos, que no podemos culpar al asesino. Se mató él solito.

A continuación puede venir bien la lista, bien el gay. La lista siempre estará totalmente sola, leyendo en algún rincón mientras el resto se emborracha, por lo que nadie se percata de su muerte hasta que ven el cadáver. El gay, por su parte, siempre lo matarán mientras se enrolla con alguien. Que siempre me he preguntado yo que qué les cuesta a los guionistas crear un personaje homosexual que no se limite a ser un personaje más. Siempre se está o dando el lote con alguien o comportándose como una mariposilla.

Ahora le toca el turno a todos esos personajillos secundarios que mueren de forma aburrida. Por lo general el asesino mata de forma especial a los personajes principales, pero a estos es una cuchillada y punto. De estos sólo suele sobrevivir uno que se une a la prota. Por lo general es una antigua amiga de la chica principal que ahora se llevan como el perro y el gato y se ven obligadas a colaborar. Finalmente vuelven a ser amigas hasta que cinco minutos después se la carga el asesino.

La gente sigue muriendo y ahora sólo queda la protagonista. Y ahora viene la escena que me encanta. La chica sale de la casa para pedir ayuda y va hacia el coche mientras el asesino, siempre disfrazado, la persigue tranquilamente, pues nunca corre. Si uno se fija, están como a kilómetros de distancia, que uno piensa que a la chica le da tiempo a abrir el coche y marcharse. Pero oye, nooooo. El llavero del coche tiene mil y una llaves: las de casa, las del garaje, las del despacho de papá, las de la casa de la playa, etc., y la chica se pasa cinco minutos para encontrar la llave que abre el coche. Una vez dentro del coche, uno ve que al asesino le queda aún medio camino para llegar. “Le da tiempo a escapar” decimos. Pero, como ando diciendo durante todo el monólogo, nooooo. La chica tiene que pegarse otros cinco minutos buscando la llave que enciende el motor. Yo no sabré de coches, pero, ¿no se supone que la llave que abre el coche y la que enciende el motor son la misma? Pues nada, que el asesino alcanza el coche justo cuando arranca y se engancha a la parte trasera. Aquí suele ya venir la periodista o policía, por lo general madre o hermana de la prota y siempre una mujer, y se carga al malo que suele ser el novio de la chica.
Damas y caballeros, desde aquí les quiero dejar un mensaje a todos los guionistas de películas de terror: ¡hagan historias con fundamento!

ATTE: Lord Sapphire; el destripador de la 20th Century Fox.

jueves, 19 de marzo de 2009

Diamantes, Sirenos, Koré

Diamantes

Diamantes.
Lujosos y brillantes.
Joyas extravagantes.

Diamantes.
Piedras que los galantes
Regalan a sus amantes.

El mejor amigo de una mujer.
Le acompaña desde el amanecer
Y a muchas hace rejuvenecer.

Oh, diamante,
Allá donde eres abundante
Mucha guerra engendraste.

¿Cómo algo que puede embellecer
Y al Sol hace palidecer
Pudo tanta sangre verter?

Sirenos

Del mundo están ajenos.
No conocen de la tierra
La eterna guerra.
Son los sirenos.

No tienen nacionalidad;
No son Helenos
Ni tampoco Chilenos.
Pero tienen una gran bondad.

No juegan al ajedrez
Ni tampoco al balonmano,
Pues son mitad humano
Y mitad pez.

Los hay morenos
Y también castaños.
Para nada extraños
Son los sirenos.

Koré u Oda a la Diosa

Viva tú, gran diosa.
Cautiva pero poderosa,
Triste pero hermosa.

De los amables brazos de tu madre,
Por el señor de los reinos abisales,
Fuiste arrancada como los cereales.

Nuestra vida depende de tus caprichos.
A quien quieres envías a sus nichos,
Nos los arrancas como a los bichos.

Ante el jurado la ultimísima palabra
Adquiriste de forma tan macabra
Que tan sólo has de decir abracadabra.

Seis semillas de granada te retienen
Mientras los inviernos los campos mermen
Y los ojos de tu madre de agua se llenen.

Tu nombre pronunciar nos aterra,
Aunque no nos traigas guerra,
Sino por lo que él encierra.

Viva tú, gran diosa.
Cautiva pero poderosa,
Triste pero hermosa.

Oh, gran Perséfone, la Doncella,
En el Inframundo una estrella
Y en la Tierra una huella.

martes, 10 de marzo de 2009

¡La Guerra de los Monyacos! *Risa Maligna*

Dije que algún día dibujaría algo. Y he cumplido:







Por si no veis lo que pone en la primera viñeta, ecce el guión:

Larxene, the Savage Bitch: Has somebody lost a kid? (¿Ha perdido alguien a un crío?)
Zexión, the Cloaked Emo: I hate you! (¡Te odio!)

Pronto intentaré colorear a Zexión.

P.D.: "Monyacos" se lee a la catalana (Moñacos)

P.D.2: El viernes 6 fue mi cumpleaños, pero se me olvidó avisar. De todas formas, lo celebro hasta el 4 de Abril. XD